Ayer fue un día muy duro para dos equipos que, durante toda la temporada, estuvieron luchando en lo más alto de la tabla con un mismo objetivo: el ascenso a Preferente. El C.D. Carnevali y el Real Sporting San José pusieron anoche punto final a una temporada exigente, marcada por altibajos y, sobre todo, por el desgaste físico y emocional que provocaron las lesiones.
Estas dificultades no solo afectaron a ellos, sino
también a otros equipos que pelearon hasta el último momento por lograr el
ascenso, si no también al resto de equipos, muchos fueron a jugar en muchos partidos con 8 om9 jugadoras y eso es digno de admiración. Finalmente, el Valsequillo se coronó campeón. Los cruces del playoff
fueron duros, y a partido único, cualquier error se paga caro.
Soy de los que opinan que quienes llegan a las
finales lo hacen por méritos propios —sin menospreciar en absoluto a los demás
rivales—. Esto es fútbol: un deporte de contacto, de estrategia, donde a veces
todo se decide por los más mínimos detalles.
Solo queda agradecer y felicitar, en primer
lugar, a todos los equipos que compitieron esta temporada en la Primera
Territorial. Gracias a ustedes, esta campaña será recordada como una de las
mejores que he vivido (y ya llevo unos cuantos años en esto).
A los finalistas, el U.D. Piletas y C.D. San Juan
que este próximo fin de semana se vistan de gala y nos regalen el mejor
espectáculo en el que hayan participado. Que desplieguen todo su potencial
sobre el terreno de juego. Y a las aficiones, que llenen de colorido las gradas
del Municipal de Piletas.
Hagamos entre todos una auténtica fiesta del fútbol FEMENINO.