Lola como la conocemos futbolísticamente es un ejemplo a
seguir, trabajadora, luchadora, constante y muy humilde.
Esta claro que cuando se quiere se puede, mucha parte de
culpa de que hoy en día haya un equipo femenino en el barrio capitalino de San
José, es gracias a ella.
Estimados leyentes de este blog:
Me presento mi nombre es Dolores R. Rosales del Pino,
conocida mejor por “Lola”. Tengo 24 años y soy jugadora del Veg. Árbol Bonito.
Aparte de jugar para el femenino, también tengo el PLACER de Entrenar a un
equipo Alevin del mismo Club, y para sumar también, estoy acabando mis estudios
de Secundaría para poder Graduarme.
Nunca se me ha pasado por la mente dejar el Fútbol y sin
problemas, día a día, procuro combinar bien “Mis Obligaciones”.
Desde pequeña siempre me gustó el fútbol, me pasaba todo el
día en la calle jugando con los niños a la pelota, mientras que las niñas se
concentraban en grupitos para jugar a otra cosa, que como comprenderéis ignoro, ya que solo me centraba en lo que me
gustaba. A pesar de que me llamaba bastante la atención el fútbol, (en esa edad
solo practicarlo), nunca me atreví apuntarme a ningún club para poder jugar en
un equipo federado.
Cuando cumplí los 14 años me pasé los siguientes 4 años
planteándome ingresar en un equipo de fútbol. Cuándo al fin me decidí ya tenía
18 años y con un poco de ayuda, me acerqué al club de mi barrio, U.D. Pedro
Hidalgo y les comenté sobre la idea de iniciar un nuevo proyecto para sumar al
club. Crear un equipo de fútbol femenino.
Pero no todo fue como yo esperaba. La propuesta no simpatizó
mucho al club, pues un equipo de chicas no es igual que uno de chicos, pero,
¿Quién demonios cree que eso es así?, pensé por ese entonces, era bastante
inocente en este mundo. El club no parecía de principio estar por la labor de
aportar por un equipo de fútbol femenino y pusieron varios obstáculos para que
no se crease, entre ellos.
Que no había dinero que necesitaban bastantes jugadoras, que
había que pagar unas cuotas, que no había campo, que tenían otro proyecto mas
interesante en mente, que el fútbol femenino no daba nada a nadie, no ahí
beneficios del fútbol femenino. ¿por que entonces apostar por un proyecto sin
beneficios?.
A pesar de la primera impresión negativa que me llevé del
club, mi compromiso a que se cumpliesen los requisitos que pedían no decayeron.
No me rendí y a todas sus respuestas negativas les busque una solución. Tuve
que comprometerme a pegar carteles en varios barrios, tiendas, piscolabis,
panaderías etc. Y también repartirlos por las calles y varios centros
comerciales. Debo decir que una vez que comencé hacerlo tuve más ayudas de la
que me imaginaba por parte del club y amigos. De gente que les gustaba el
fútbol femenino y quería que el proyecto saliese adelante.
No recuerdo exactamente la fecha, pero si me acuerdo que fue
en febrero cuando se inició la pretemporada, a la cual acudieron 34 jugadoras
para hacer las pruebas en nuestro equipo femenino. Tenía que conseguir que
viniese mínimo 18 jugadoras y acudieron el doble. De esas 34 chicas, entre 6 y
9 se aburrieron. Del resto cuando llegó el entrenador y descarto tantas que
solo se quedó con 11 jugadoras. Yo tuve la gran suerte de ser seleccionada
entre esas 11, pero en ese momento me invadieron varios sentimientos
contradictorios a la misma vez, por una parte estaba muy contenta de formar
parte del equipo, por otra parte me entristecía saber que no iba a poder
compartir día a día de entrenamientos con el resto que se quedó en el camino.
Pero cuando unas se van… otras vienen.
Aquí os dejo una foto de agosto del 2008, un mes antes de
empezar la liga. El club nos llevo a participar a un torneo de fútbol playa en
La garita. Estas fueron mis compañeras seleccionadas.
U.D. Pedro Hidalgo.
Fila de abajo de derecha a izquierda: Priscila, Eli, Lola,
Yle Melián, Ylenia, Pino y Selene.
Fila de en medio por el mismo orden: Yani Torrubia, Yaritza,
Marta, Rancés(que sin ser nuestro entrenador, se ofreció a acompañarnos al
torneo) y Cori.
En la fila de arriba: Yohana.